Los jugadores de Irán no cantaron su himno nacional ni celebraron sus goles.
En las gradas, muchos hinchas iraníes se solidarizaron con el movimiento de protesta que agita al país desde hace meses.
El partido inaugural de la Copa Mundial de Irán el lunes contra Inglaterra no se trató solo de fútbol, sino también de las luchas políticas que afectan a la República Islámica.
Y para algunas mujeres iraníes, a las que se les prohibió asistir a los partidos de fútbol masculino en casa, fue una preciosa primera oportunidad de ver a la selección nacional en directo.
Irán perdió 6-2 ante un equipo superior de Inglaterra, pero el resultado no fue lo más importante para Mayram, una residente de Teherán de 35 años que también vio su primer partido de fútbol en vivo.
Le decepcionó que los jugadores no mostraran una solidaridad más abierta con las protestas en casa.
Fuente: AP