La Cumbre de Paz de Ucrania, que reunió a cerca de 60 líderes mundiales y representantes de unos ochenta gobiernos, finalizó este domingo con una declaración conjunta que reclama seguridad nuclear y de tránsito marítimo, aunque doce países destacados del mundo en desarrollo y socios de Rusia en ciertos foros, declinaron firmar el documento.
Entre estos se encuentran Brasil, India y Sudáfrica – que forman parte junto a Rusia y China del grupo de economías emergentes, conocidos como los BRICS-, además de México.
Tampoco se unieron a la declaración final Armenia, Baréin, Indonesia, Libia, Arabia Saudí,Tailandia y Emiratos Árabes Unidos, mientras que 84 países sí suscribieron el documento, incluidos los países de la Unión Europea, Estados Unidos, Japón, Argentina, Chile y Ecuador.
Al final del segundo plenario de líderes, celebrado hoy, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, agradeció la participación de las delegaciones y que hayan comprendido que “todos estamos interesados en que no hay peligro procedente de las plantas nucleares y otras instalaciones atómicas”.
“Estoy agradecido de que los participantes en esta conferencia hayan comprendido esto y la necesidad de restaurar una seguridad total en la planta de Zaporiyia, capturada por Rusia”, agregó.
“También les agradezco a cada uno por apoyarnos en nuestros esfuerzos de garantizar una navegación segura y preservar el flujo libre de alimentos”, destacó el mandatario ucraniano.
Los líderes políticos que participan en la Cumbre de la Paz para Ucrania adoptarán este domingo una declaración que pone énfasis en la seguridad nuclear, defiende que la central nuclear de Zaporiyia debe funcionar bajo el completo control ucraniano, al tiempo que piden seguridad para el tránsito de mercancías por el Mar Negro.
La declaración supondrá el cierre este domingo a dos días de pronunciamientos públicos e intercambios en privado entre un centenar de delegaciones de países, de las cuales más de 60 están encabezadas por presidentes y jefes de Estado.
El documento recoge temas en torno a los que se podía asumir que existiría consenso, pues si bien los participantes están de acuerdo con que la guerra en Ucrania debe cesar, no todos piensan lo mismo sobre cómo llegar a ese punto.
Mientras los europeos se sienten directamente amenazados por este conflicto y forman un bloque contra Rusia, países de otras regiones se han atrevido a hablar de que ambas partes tendrán que hacer concesiones, lo que en estos momentos tanto Kiev como Moscú rechazan.