Una garantía económica de 200 mil pesos en forma de contrato, presentación periódica y 300 horas de trabajo comunitario fueron las medidas impuestas a Julio César Jiménez Martínez, quien fue detenido y sometido a la Justicia por arrastrar a un perro atado a la parte trasera de su vehículo en Higüey.
La medida fue adoptada por la Oficina de Atención Permanente del Distrito Judicial de La Altagracia y aceptada por el abogado defensor de Jiménez Martínez.
En tanto que, la parte querellante expresó su indignación y anunció que presentará un recurso de apelación.
Jiménez Martínez, de 37 años de edad, dio a conocer ayer su versión sobre el caso y asegura que no fue intencional.
Señala que encontró el perro en el mueble de su casa en un estado ya delicado, dijo que acudió al Ayuntamiento de su localidad y no tenían los mecanismos para tratar esos casos y no tuvo otra opción que sacarlo, ya que su hijo de 7 años estaba en riesgo con el perro.
El acusado indicó que iba a una velocidad mínima para no provocarle daños al animal, el cual asegura ya estaba sangrando y con gran hedor.