La contaminación de nuestro planeta está alcanzando niveles alarmante, pero un nuevo invento quiere ayudar a nuestro querido planeta Tierra.
El inventor es un mecánico brasileño llamado Alfredo Moser. Es un hombre bastante humilde y con una creatividad increíble. En 2002, la ciudad de Uberaba, en el estado de Sao Paulo, estaba pasando por un déficit de electricidad debido a la última crisis de energética vivida en Brasil. Sin embargo, Moser decidió tomar cartas en el asunto e intentar remediar este gran problema que sacudía a toda la población de esa localidad. Es por esto que ideó este innovador y eficaz sistema.
La idea es bastante simple y efectiva. Las botellas con agua cumplen la función de tragaluz, reflejando y amplificando la luz del sol durante el día, sustituyendo así a las ampolletas, pero con algo realmente impresionante: este invento no necesita de la electricidad. Estos son los pasos a seguir para lograrlo:
- Cogemos una botella de 2 litros de plástico PET
- Se llena de agua limpia
- Le añadimos 2 tapones de lejía para evitar el crecimiento de algas y moho.
- Protegemos el tapón de cierre con el envase de un rollo de película fotográfica, para evitar que éste se degrade y se pueda evaporar y contaminar el agua.
- Perforamos el techo del lugar a iluminar
- Colocamos una parte de la botella en el exterior que actuará como recolector solar y la otra parte en el interior, que hará las veces de lámpara ?ecológica?.
Con esto conseguiremos un foco que generará entre 40 y 60 watts y que no requiere de ningún tipo de mantenimiento para su funcionamiento.
¿Qué pasa con el rendimiento en los días nublados o con lluvias? Éste, efectivamente es menor, pero sigue teniendo buenos resultados, ya que la parte que hace las veces de captador solar, parece que no sólo recoge la luz, sino que la intensifica, como hacen los espejos en las plantas solares. Si te gustó esta innovación, ¡¡compártela con tus amigos!!