El presidente saliente de Ecuador, Lenín Moreno, responsabilizó el lunes a las casas farmacéuticas de no cumplir su ofrecimiento de vacunar a dos millones de ecuatorianos hacia el final de su mandato.
En una semana, Moreno será reemplazado por el mandatario electo, Guillermo Lasso.
En su rueda de prensa semanal, la última de su gestión, afirmó que “vamos a llegar el día 24, más o menos, a 1,8 millones de personas vacunadas.
La verdad es que siempre nos hemos puesto un propósito mayor”, al recordar que la meta de inmunización de su gobierno era de dos millones de personas.
Entre las razones por las cuales no pudo cumplir su ofrecimiento, argumentó que “en primer lugar por la falta de seriedad de las empresas farmacéuticas que hicieron un ofrecimiento (de entregas puntuales) cuando nosotros pagábamos el 20% del anticipo”.
Destacó que ”únicamente Pfizer y el sistema COVAX nos han permitido tener vacunas” sin retrasos.
A inicios de este mes, los ecuatorianos esperaban 1,5 millones de dosis de Sinovac y AstraZeneca, pero aún no han llegado.
Ecuador ha desembolsado un total de 75 millones de dólares a las casas AstraZeneca, Sinovac y Pfizer para asegurar la provisión de vacunas, pero Lasso ha anticipado que este país también comprará la rusa Sputnik V, la china Cansino y la estadounidense Johnson & Johnson.