Las protestas de agricultores en Europa no se detienen. En La Creuse, una población y comuna francesa, situada en la región de Franco Condado, un grupo de manifestantes lanzó litros de estiércol en la estación de policía.
Los agricultores denuncian en particular la caída de los ingresos, las bajas pensiones, la complejidad administrativa, la inflación de las normas y la competencia extranjera. También se muestran reticentes a las reformas adoptadas para mitigar los efectos del cambio climático que, según dicen, no tuvieron en cuenta a las familias dependientes de esta industria.
Las protestas de productores agropecuarios, que también se registraron en Países Bajos, Polonia y Rumania, se producen a unos cuatro meses de las elecciones al Parlamento Europeo, institución clave para fijar las normas medioambientales del bloque.