Aunque el proceso de vacunación contra el coronavirus ya partió en varios países del mundo, los gobiernos han debido reiterar la importancia de la vacunación y en algunos lugares incluso han hecho campaña para incentivar a quienes todavía se resisten a la inoculación.
Un ejemplo es el «castillo de Drácula» que está suministrando a sus visitantes la vacuna contra el Covid-19 desarrollada por Pfizer.
Concretamente se trata del Castillo de Bran del siglo XIV ubicado cerca de Braşov en Transilvania (Rumania) y que sirvió de inspiración para la novela de Bram Stoker «Drácula».
«Vine a visitar el castillo con mi familia y cuando vi el póster, me animé y acepté recibir la inyección», comentó el ingeniero Liviu Necula, de 39 años, según informa DW.
Esa es la razón por la que médicos y enfermeras reciben a los turistas vestidos con pegatinas de colmillos en sus batas y le suministran la vacuna a quien quiera recibirla.
Los turistas vacunados recibirán un certificado de «audacia y responsabilidad» que promete que serán bienvenidos en el castillo «durante los próximos 100 años», al tiempo que podrán disfrutar de una visita gratuita a la exposición de instrumentos de tortura medievales de la fortaleza.
Hasta la fecha Rumanía ha registrado más de un millón de contagiados de coronavirus desde que comenzó la pandemia, provocando casi 29.000 muertes.
El objetivo del gobierno rumano es el de vacunar a 10 millones de personas antes de septiembre, sin embargo, pero casi la mitad de la población del país afirman que no están dispuestos a inyectarse el fármaco, uno de los niveles de rechazo más altos de Europa.
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