Un tribunal de Tailandia condenó a Sararat Rangsiwuthaporn, defendida «Am Cianuro», a la pena de muerte por el asesinato premeditado de Siriporn Khanwong, una de las 15 presuntas víctimas que, según las autoridades, habría envenenado con cianuro. Siriporn, de 32 años, falleció en abril de 2023 durante un ritual budista en Ratchaburi, donde ambos liberaban peces en un río para acumular buen karma.
La investigación se inició tras el hallazgo de cianuro en el cuerpo de Siriporn y las denuncias de sus familiares. A partir de ahí, la policía descubrió otros 13 casos relacionados con Sararat, además de un intento de asesinato. Entre las víctimas se encuentran amigos y conocidos de la condenada, así como su novio, Sutthisak Phoonkhwan, quien murió en marzo de 2023 en circunstancias sospechosas.
Según las autoridades, el móvil de los crímenes era el robo, ya que muchas de las víctimas habían transferido grandes sumas de dinero a Sararat. Los asesinatos habrían comenzado en 2015 y continuaron hasta su detención en 2023, mientras estaba embarazada. Este caso, que ha conmocionado al país, ha sido comparado con otros envenenadores seriales, como el francés Charles Sobhraj y las estadounidenses Belle Gunness y Amy Archer-Gilligan.
La madre de Siriporn, quien asistió al juicio, pidió justicia en nombre de su hija y de las demás víctimas. Entretanto, Sararat continúa proclamando su inocencia, pese a las pruebas en su contra.