El Ministerio Público solicitó prisión preventiva como medida de coerción para una red criminal, compuesta por agentes de la Policía Nacional, acusada de sustraer más de 900,000 proyectiles de la institución. La solicitud fue presentada por Wilson Camacho, titular de la PEPCA, ante la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, acompañada de 213 páginas con 135 elementos de prueba que sustentan la gravedad del caso.
Camacho subrayó la implicación de altos funcionarios policiales, calificando el hecho como una amenaza para la seguridad nacional y destacando que el caso podría ser declarado complejo. Además, agradeció la colaboración del mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, director de la Policía Nacional, en el avance de la investigación, que incluye rastrear el destino de las municiones y posibles vinculaciones con armas y pertrechos militares.
El caso, denominado «Operación Pandora», implicó allanamientos en diversas provincias y la detención de oficiales como el coronel Narciso Féliz Romero y el capitán Nelson Valdez, entre otros. Durante las investigaciones se incautaron armas, municiones y pruebas digitales, consolidando un caso robusto presentado ante el tribunal.
