Rafael Alvarado, un joven de 19 años, se entregó a las autoridades en relación con el asesinato de Fernando Ayendi Calderón Peña y su padre, Omero Calderón, así como por la lesión de otro joven identificado como Stalin, en un incidente ocurrido el pasado domingo en el sector Villa Coral, San Pedro de Macorís.
La entrega se llevó a cabo en presencia del licenciado Andrés Luis Gómez, presidente de la Fundación Nacional de los Derechos Humanos, y su abogado penalista, Ramón Feliciano Cedano. También estaban presentes su madre, Sonia Alvarado, y otros familiares, quienes defienden la inocencia del joven y afirman que no tuvo ninguna participación en el trágico suceso. La decisión de entregarse se produjo después de varios allanamientos realizados por el Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM), lo que generó preocupación en su entorno familiar.
Al momento de su entrega, Rafael Alvarado fue recibido por el coronel Teófilo Valenzuela, subdirector Regional Sureste de la Policía Nacional, junto a un equipo del DICRIM en la comandancia general de la zona.
Las investigaciones continuarán para determinar la culpabilidad o inocencia de Alvarado, mientras las autoridades buscan esclarecer los detalles de los hechos ocurridos la madrugada del lunes. Se espera que los resultados de estas investigaciones ayuden a tomar una decisión adecuada sobre el futuro legal de Rafael Alvarado.
